sábado, 10 de noviembre de 2012

intentaré

Intentaré hablar sobre un tema que me trae preocupada.
Mi grupo de amigos.
Es una cagada el hecho de que se esté separando y nada pueda hacerse al respecto.

Mi grupo de amigos empezó formado por seis personas, tres chicas y tres chicos, y nos llevábamos muy bien. Poco a poco fue sumándose gente, y luego fuimos diez. Debo de admitir que no me gustó nada el hecho de que se sume gente, porque soy muy tradicionalista, y no me adapto fácil a los cambios. Pero rápidamente me empezó a agradar la nueva gente, conforme los fui conociendo, y los agregué a mi lista de amigos.
Luego fueron más y más y más, hasta que el grupo de Facebook que engloba a la gente con la que me junto incluye a más de veinte personas. El grupo en total será de aproximadamente... No sé, ¿treinta? ¿Más? Cosa que ya me fui adaptando a la aparición de gente nueva... Aprendí que la mayoría de los que entran velozmente se van a ir; aprendí que es interesante charlar y aprender cosas de los que van entrando; y aprendí que hay muchos que es mejor que no estén, o que se van a ir y no debo llorar por eso, sino que es para mejor, o es intrascendente.

En semejante grupo de personas, era obvio que iba a haber subgrupos, o gente que se junte más con algunos que con otros. Pero eso no significa que esa gente se lleve mal entre sí. Bueno, parece que en mi grupo de amigos sí es así.
No sé si es una cuestión de la edad o qué, pero hay dos líderes femeninas y atrás van los varones, y las otras chicas eligen. Sin embargo, hay "pica" muy evidente entre los grupos, y somos todos falsos e hipócritas con los demás, por lo menos en una pequeña medida.

La verdad, me parece que hay demasiada agresión. Iba a escribir "innecesaria" pero la agresión nunca es necesaria, así que lo retiro = P
Prosigo: quizá uno tenga más afinidad con unos que con otros, pero por favor, ¡no nos tratemos mal! No hay necesidad de eso, y mucho menos si nos gusta nuestra compañía. Y si no nos gusta, no hagamos perder el tiempo al otro ni perdamos energías, sólo alejémonos de él y listo.
Quizá de este modo algunos dejen de verse o de tener espacios en común, pero seguro nos sintamos mucho mejor.

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